Yo tenia sobre 18 años cuando llegaron unas misioneras y conocieron nuestro Barrio. Entonces fue cuando nos propusieron hacer un Vía Crucís Viviente por el entorno del paisaje que, según vieron, era muy propicio para y representar la pasión de nuestro Señor Jesucristo. Por esa época empezamos a hacer preparativos y empezó todo.
Recuerdo muy bien que los trajes de Romano eran de papel de plata, confeccionados por las mujeres del barrio y las propias hermanas misioneras. Por cierto, el papel que me toco representar era el de Verdugo Romano para flagelar y dar muerte a nuestro Señor Jesucristo. Durante los primeros años, continué haciendo el papel de la burla, hasta que el señor que representaba al Buen ladrón dejo de hacerlo y entonces empece yo a hacer de buen ladrón dejo de hacerlo y entonces empecé yo a hacer el papel de buen ladrón, Así continué durante muchos años. En esta escena, el papel que representaba me entro muy bien ya que actuaba de una forma muy sencilla. Así continué durante una década larga. No se exactamente cuantos años porque el tiempo va muy deprisa y pasan los años sin darte cuenta.
Y llego el día en el que el Sr, José Morant, que representaba a Jesucristo tuvo que dejar el papel. La Hermandad se encontró con el problema de la sustitución. Se empezó a trabajar con la gente de la cofraria con características para hacer el papel de Jesucristo. Se hizo un "Casting" y el papel recayó sobre mi persona. Entonces cambio mi vida radicalmente porque no me esperaba esta responsabilidad y porque miraba yo que no era el adecuado para hacer de Jesucristo. Ahí empezó todo hasta nuestros días. Durante 20 años, no se exactamente lo que me pasa cuando empieza el Vía Crucis porque soy como un mar de nervios porque siempre, año tras año, parece que sea la primera vez que interpreto el papel.
Seguro que me dejo algo sobre el tintero. Estoy escribiendo esas lineas y ya me siento distinto, nose como explicarlo...
Este año he tenido el honor de celebrar el 40º aniversario del Vía Crucis Viviente, nose como expresar esa emoción y sentimiento que he tenido se me pasan muchas cosas por la cabeza, no tengo palabras para describirlo.
Para acabar quisiera expresar mi agradecimiento a toda la Hermandad sin distinciones. Porque sinceramente creo que sois maravillosos y os merecéis un 10!! por la paciencia que habéis tenido conmigo. Gracias a todos y a todas. Perdonad por no decir nada sobre las personas que ya no están con nosotros.
"Gracias también a todos ellos, con mucho afecto"
Juan Jose Merino Muñoz
( CRISTO )
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